Trochilidae Picaflores
Hummingbirds
Los Picaflores
"La clase especial de belleza que convierte
en una revelación el espectáculo del picaflor, visto por primera vez, surge
de sus rápidos y peculiares movimientos y del intenso brillo metálico de su
plumaje, que lo hace parecer una joya. La diminuta y exquisita forma que
revolotea con sus alas nebulosas, sondeando las flores con su lanceta color
coral, la cola abierta en forma de abanico y en actitud inmóvil, presenta a
la vista sus plumas de variados colores, para desaparecer al cabo de un
instante y hacerse presente enseguida encima de otra flor. Segundos después
se esfuma de nuevo y así sucesivamente, ostentando el esplendor de su
colorido, no de modo continuo, sino con la rapidez intermitente de la luz de
las luciérnagas. Esta gracia alada, esta belleza aérea, es indescriptible".
W. H. Hudson,
El Naturalista en el Plata, Londres, 1891.
Picaflor y Colibrí son nombres
comunes y sinónimos utilizados en los países de habla hispana para referirse
a las especies de la familia trochilidae, exclusivamente americana. En Inglés
se los llama Hummingbird (Pájaro
zumbador), en Guaraní
Mainumbí o Mainumby.
 
Macho de Picaflor Corona Violácea, Andresito, Misiones; y Picaflor
Golondrina, Iguazú, Misiones.
_small.jpg) 
Hembra de Picaflor de Barbijo, Villaguay, Entre Ríos;
Macho de
Picaflor Vientre Negro, Iguazú, Misiones.
 
Hembra de Picaflor Vientre Negro con
luz natural y con luz de flash.
Cuando los
primeros españoles llegaron a América, se
encontraron con estas pequeñas aves desconocidas en el viejo mundo y
maravillados,
pensaron
que podía tratarse de
insectos; uno de los primeros nombres que
utilizaron para referirse a ellos fue "Pájaro
Mosca".
Se distribuyen por todo el continente y prácticamente por todos
los ambientes, desde Tierra del Fuego hasta Alaska, desde la selva amazónica
hasta el desierto de Atacama y desde el nivel del mar hasta más allá de los
5.000 m s.n.m.
El Picaflor más austral es el Picaflor Rubí (Sephanoides
sephanoides), estrechamente ligado al Bosque Andino Patagónico y que
llega hasta Ushuaia, Tierra del Fuego, Argentina, la ciudad más austral del
mundo; y el más boreal es el Picaflor Rufo, Rufous Hummingbird (Selasphorus
rufus), que llega hasta Alaska. Este picaflor además, es el que que
tiene documentada la migración más extensa, unos 5.600 kilómetros lineales desde Florida
hasta Alaska, pero con una ruta real calculada en unos 7.000 kilómetros
(Riley Woodford,
2010), que en realidad son 14.000 kilómetros de ida y vuelta para un ciclo anual.
 
El más austral, Picaflor Rubí (Sephanoides
sephaniodes) calentándose al sol después de una
nevada. San Carlos de Bariloche.
 
El más boreal,
Rufous Hummingbird, Picaflor
Rufo (Selasphorus
rufus), U.S.A.
En América,
hay aproximadamente
365 especies
(Birdlife, 2017) de las
cuales unas 260 son exclusivas de Sudamérica, unas 31
están presentes en Argentina,
8 en Uruguay y
8 en Chile.
El Picaflor
zunzuncito o abeja (Mellisuga helenae),
de Cuba,
mide sólo 5 cm. y en Argentina, el Picaflor Amatista (Calliphlox
amethystina) mide 6 cm y pesa entre 2.3 y 2.8 gr.
La especie
más grande, el Picaflor Gigante (Patagona gigas), mide unos 22 cm.
La mayoría de los colibríes presenta un
plumaje muy vistoso.
La micro estructura particular de sus plumas y el ángulo de incidencia de
la luz sobre estas los hace verse de brillantes colores metálicos
(tornasolados, colores estructurales) en donde, si bien predominan los
verdes, aparecen rojos, naranjas, azules, amarillos, etc.
Esta característica es más visible en los machos y suele destacarse en las
crestas y colas y no en las alas, ya que las modificaciones
estructurales de las plumas iridiscentes no son compatibles con la cohesión
y resistencia que necesitan las plumas implicadas en el vuelo (Humberto
Álvarez, 2000).
 
1
Picaflor Bronceado en penumbras. El color estructural reacciona a la
luz del flash. 2
El mismo individuo centésimas de segundo después, con la escasa luz natural y sin flash. Iguazú, Misiones.
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Picaflor Corona Violácea iluminado con luz de
flash, Andresito, Misiones. Hembra
Picaflor de Barbijo, Villaguay, Entre
Ríos.
Su
tipo de plumaje ocasionó la captura y muerte de cientos de miles de
Picaflores para ornamentar sombreros,
prendas femeninas y vitrinas
europeas en épocas pasadas, ocasionando la extinción de
innumerables
especies. Solo para el caso de Colombia, unas veinte especies extintas a
fines del S. XIX se conocen por sus pieles de estudio, rotuladas
únicamente como "provenientes de Bogotá" (Jorge
Enrique Orejuela Gardner, 2000).
Otra característica especial de los colibríes es el pico. El Colibrí Pico
Espada (Ensifera ensifera) tiene un pico casi tan largo como el cuerpo, de
unos 10 cm. de longitud. El Pico espina de Dorso Púrpura (Ramphomicron
microrhynchum) tiene por su parte un pico de apenas 5 mm. Los colibríes
Pico de Hoz (Eutoxeres aguila) (Eutoxeres condamini) poseen
un pico que se curva de manera pronunciada hacia abajo. Cada pico
representa una especialización a un tipo determinado de flor que permite
al colibrí ocupar un nicho ecológico particular y de esa manera evitar la
competencia. Todas las especies prefieren las flores de color rojo o
naranja brillante.
_small.jpg) 
Picaflor Bronceado. Hay especies que
agujerean las flores en la base.
Hembra
Picaflor Vientre Negro
posada y aprovechando la lluvia subtropical.
 
Macho
Picaflor Rubí, postura de amenaza
durante la defensa territorial.
Sus patas son muy pequeñas y no les
sirven para caminar, las usan para posarse y descansar en sitios altos de los
cuales pueden "descolgarse" en vuelo; y muchas especies, no todas, para
sostenerse mientras liban el néctar de la flor.
 
Su lengua es larga y tiene forma de pajita, lo que le permite chupar el
néctar con facilidad.
Se alimentan principalmente
de néctar de flores para obtener las calorías que necesitan; las proteínas
las obtienen de pequeños insectos y arañitas. Esta alimentación, rica en
energía por ser de azúcares simples, es la que posibilita su estilo de
vuelo de gran consumo energético. Su pequeño tamaño, y consecuentemente su
alto metabolismo, también necesitan de un alto consumo energético.
Cuando vuelan pueden hacerlo en cualquier dirección, incluso hacia atrás.
Pueden mantenerse fijos en el mismo sitio mientras aletean hasta 80 veces
por segundo en vuelo normal y algunas especies hasta 200 veces por
segundo. El esfuerzo que demanda esta capacidad ocasiona que posean
grandes músculos pectorales y un corazón que llega al 20 % del peso total.
 
Picaflor Negro y Blanco adulto;
Picaflor Negro y Blanco
Juvenil.
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Macho y Hembra de
Picaflor Rubí
Son excesivamente confiados, probablemente debido a su extraordinaria
capacidad de vuelo. Esta característica, sumada al incremento de comederos artificiales, los pone
en peligro frente a los gatos domésticos, llegando en algunos casos a
situarlos en riesgo de extinción (ver Picaflor de
Juan Fernández Sephanoides fernandensis)
Son muy territoriales. Los machos defienden agresivamente su área de
alimentación, que dependiendo de la oferta de alimentos puede ser una
planta o una superficie mucho mayor.
Durante el cortejo los machos realizan espectaculares despliegues aéreos y
luego de la cópula, cuando las hembras ya han sido fecundadas, las dejan y
ellas construyen un pequeño nido forrado interiormente de tela de araña,
algodón, líquenes y musgos; por lo general en un arbusto de poca altura, pero puede
estar en rocas, construcciones humanas, etc. La puesta es normalmente de
dos huevos que ella empolla durante 14 a 19 días. Luego alimenta a sus
pichones durante unas tres a cuatro semanas yendo al nido hasta 140 veces al
día. El padre, hasta donde se sabe, no participa de la construcción y
crianza.
Durante la noche, y las especies de lugares fríos durante el invierno; los
Picaflores entran en "torpor" (letargo); período en el que bajan su
temperatura corporal y disminuyen los latidos de su corazón para poder
permanecer privados de alimento.
Agradecimientos a U.S.
Fish & Wildlife Service, fotografías CC BY 2.0 de Peter Pearsall y Roy W.
Lowe.
Trochilidae
Mariano
Costa
2008. Actualizado
2010, 2017, 2020.
Introducción a los picaflores.
Fotografías de Mariano Costa, Peter
Pearsall
U.S. Fish
& Wildlife Service
y Roy W.
Lowe
U.S. Fish
& Wildlife Service
©2006-2021 Mariano Costa - Aves Patagónicas - Freebirds
www.avespatagonicas.org
19 febrero 2021
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